Queridos amigos:
En el 2016, se cumplen 70 años desde que comenzó Guadaira, en 1946 en la calle Canalejas. Desde entonces, cuánto le debemos a los que abrieron el surco en la Universidad de Sevilla, aportando un estilo cordial y un buen hacer universitario en aquella universidad de menores dimensiones que la actual, aunque siempre con un profesorado prestigioso.
El clima cultural que aportó Guadaira al mundo universitario fue notorio, por el prestigio de los conferenciantes y el interés de los temas. Muchos universitarios que no residían en el Colegio Mayor acudieron en aquellos años a las Actividades Culturales y tertulias con gente prestigiosa de todas las ramas profesionales y deportivas. No es exagerado decir que Guadaira tenía un gran prestigio al que los residentes contribuyeron sintiéndose en su casa con una mentalidad abierta y cordialidad. A la vez, de Guadaira salieron valiosos profesionales que hoy están extendidos por Andalucía y el resto de España e Hispanoamérica.
El 27 de marzo de 1945, San Josemaría llegó a Sevilla acompañado de otras personas, uno de ellos era Don José Luis Múzquiz, ya ordenado, y dos arquitectos de Madrid. Venían a ver el lugar que se había pensado como residencia de estudiantes. Pernoctaron en el hotel Oromana de Alcalá de Guadaira. Al día siguiente visitaron la sede de Canalejas 8 y llegaron a un acuerdo con el dueño. En Enero de 1946, Guadaira abrió sus puertas.
En 1948 se encargó de la dirección de la residencia, don Jesús Arellano, catedrático de filosofía
de la Universidad de Sevilla que tanto influiría en Guadaira, en sus residentes y adscritos . El 14 de julio de 1951, el Ministerio de Educación Nacional erige por Decreto la Residencia Universitaria en Colegio Mayor. La universidad de Sevilla estrena con aquel Decreto, su primera institución privada.
En 1968, Guadaira se traslada a La Palmera y se amplía a 100 residentes. 47 años en la nueva sede y ya cuenta con solera de ambiente, de estudio, de instalaciones que se van remozando y de gran presencia cultural y deportiva y el mismo espíritu que animó los comienzos.
Nos espera un curso estupendo en el que espero que los Amigos de Guadaira vengan a su Colegio Mayor como a su casa, sabiendo que será una alegría volver a vernos y reconocernos en los residentes actuales con el mismo ambiente de familia de siempre. Ya anunciaremos las fechas de reunión.
Hasta pronto.
Un abrazo,
Antonio Gutiérrez
Presidente de Amigos de Guadaira